miércoles, 29 de febrero de 2012

POESIA AL FUTBOL RUSTICO

Poesía al fútbol Rustico


Pudiste haber jugado o no en ese club de tus amores tan soñado…
Pero decime quien alguna vez no soñó de pibe ser ese 10, si ese 10 de nuestra selección habilidoso y rápido que la empalma con una bolea casi acariciando la pelota para ponerla donde duermen las arañas en ese gol tan soñado sobre la hora para ganar la final del mundo contra nuestros vecinos los Brasileros en un partido muy ajustado que con tu gol terminan ganando por 3-2, si eso si es muy difícil pero no imposible. Aunque otros como yo sueñan con ser ESE 2, tan rustico que el mismo Materazzi temblaría de tenernos en contra, en un equipo de primera división (en mi caso Independiente) que seria un honor poder despejar con tal fuerza, casi con “bronca”, ese balón que viene al ras de ese gran pasto que tienen nuestras canchas para mantener 0-0 a los 5 min. del Primer Tiempo… Esto mis amigos no es conformarse con poco, no no, esto tampoco es soñar algo un poco mas probable (tampoco), esto es lo que a pocos el día de hoy les gustaría (que algunos considerarían locos) tan solo por el hecho de ser el 2 rustico que pone tantos huevos que un animal los envidiaría. Esto se debe no a mis “habilidades” ni “interés”, esto es por propia decisión de ser el jugador tal vez no mejor de la cancha pero si el que salga aplaudido por la tribuna popular por poner tal ganas en la cancha que muchos quedarían asombrados…
El jugador rustico no es aquel jugador de “madera” que lo ponen a defender porque todos los habilidosos van arriba o al medio, es ese que todos tienen miedo de pasar porque te puede arrancar las piernas en la primera que le quieras tirar un caño y que cada jugada sea como la ultima.
El Rustico es ese mayormente 2 que no le interesa la plata o lo que digan los demás, le interesan sus compañeros, el que sabe que puede confiar en cualquiera porque no va a defraudar a nadie, que cada pelota que pifie no va a ser un gol en contra porque va a volver a marcar al rival sin importar que este tan acalambrado que este a punto de desgarrarse.
Es aquel que si es necesario se carga a sus 10 compañeros de cancha y encara para el medio y con incontables patadas encima que se ligaría va a correr hasta el arco rival para hacer ese famoso gol de Rebote.
El rustico no es aquel que tiene un hacha en la pierna, no juega para golpear y tiene habilidad y cabeza. sabe donde esta parado, El rustico es el jugador que mas huevos tiene que poner en la cancha (para nivelar su escasa habilidad), que si a un compañero le pegan un famoso “guadañazo” este valla y le tire dos “planchas” en la rodilla izquierda, es aquel que cuando de tantas veces haber despejado la pelota tire un amague y todos se lo coman pensando que este iba a patear, que no le interesan hacer goles como Maradona a los ingleses esquivando a mas de la mitad del equipo rival ni hacer goles de tiro libre con una comba de otro planeta, le interesa que la pelota entre en la red de cualquier manera y que el línea no levante la bandera para salir a celebrar un gol tan desaforadamente que todos se lo quedan mirando dándole chapa de loco… El jugador rustico juega con el Corazón.


“Pude alguna vez haberme equivocado pero de mi camino no me arrepiento”

Leandro Pellegrini.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

facebook